¿Cómo conservar bien el café?

Optimizar la conservación del café es esencial para preservar la integridad de sus aromas y evitar errores frecuentes como el almacenamiento en el congelador o la compra en demasiada cantidad.
Comprender las diferencias entre café en grano y café molido es crucial para saborear cada taza al máximo.
Por qué conservar bien el café es esencial
La conservación del café juega un papel fundamental en la calidad de tu bebida.
Dejarlo al aire libre provoca una oxidación rápida y altera los aromas.
Los amantes del café saben que un buen almacenamiento es tan importante como el método de extracción.
Duración de conservación ideal
- Café en grano: aproximadamente 5 semanas en buenas condiciones sin pérdida notable de aromas.
- Café molido: mucho más frágil. Idealmente, consumir en la hora posterior a la molienda. En buenas condiciones, se conserva aproximadamente 10 veces menos tiempo que el grano.
Los errores a evitar
- Comprar en demasiada cantidad: un stock para 3 o 4 meses se degradará inevitablemente.
- Almacenamiento en la nevera o congelador: humedad, choques térmicos y absorción de olores de otros alimentos.
- Usar un recipiente que deje entrar el aire: el oxígeno oxida rápidamente el café.

Los enemigos del café
Los 4 principales enemigos del café son:
- Oxígeno
- Luz
- Humedad
- Calor
La mejor protección: un recipiente hermético, opaco, conservado a aproximadamente 20 °C.
Si el bote se vacía por la mitad, el aire restante acelera la oxidación.
Métodos eficaces de conservación
Las bolsas de tostadores

Las bolsas originales, herméticas con válvula unidireccional, son económicas y eficaces.
Protegen de la luz y permiten extraer el oxígeno fácilmente.
Botes con válvula
Estos botes de acero inoxidable expulsan el aire a medida que se cierran.
Permiten conservar el café en grano aproximadamente 1 mes.
Botes al vacío

Aspiran el aire gracias a una pequeña bomba.
Las opiniones de los usuarios son muy positivas.
Botes de CO₂

Reemplazan el oxígeno por CO₂, gas inerte que no oxida el café.
Inconveniente: uso de cartuchos desechables, costoso y poco ecológico.
Conclusión
Conservar bien el café no requiere una gran inversión.
Basta con conocer los principios básicos y adoptar los buenos reflejos para preservar frescura y aromas por más tiempo.
- Un buen café siempre comienza con una buena conservación.
- Almacene su café en pequeños lotes para limitar la exposición al aire en cada apertura.


